ISSN 2773-7705
Periodo. Julio – Diciembre 2019
Vol. 1, Nro. 1, Publicado 2019-12-31
https://revistas.itsup.edu.ec/index.php/higia
obstante, en Manabí en el distrito de salud reposan
datos sobre la prevalencia de infecciones urinarias
que fue de 67/300 (22,33%) y Escherichia coli fue el
uropatógeno bacteriano más prevalente con 41/67
(61,19%) seguido de Staphylococcus aureus 10/67
(14,93%).
Los ginecólogos con frecuencia evalúan a los
pacientes en busca de infecciones urinarias. Algunas
percepciones erróneas de la interpretación de los
síntomas del paciente y los resultados de laboratorio
conducen a un sobretratamiento de la IVU (3). En
este caso se busca conocer la conducta de la
infección, así como los factores biológicos que
inciden en las infecciones recurrentes que son
comunes y es importante que se controlen y
prevengan de manera efectiva.
Las infecciones urinarias son las infecciones
ambulatorias más comunes en los Estados Unidos
(EEUU). Con la excepción de un pico en mujeres
jóvenes de 14 a 24 años, la prevalencia de
infecciones urinarias aumenta con la edad. La
prevalencia en mujeres mayores de 65 años es
aproximadamente del 20%, en comparación con
aproximadamente el 11% en la población general.
Entre el 50% y el 60% de las mujeres adultas tendrán
al menos una IVU en su vida, y cerca del 10% de las
mujeres posmenopáusicas indican que tuvieron una
IV en el año anterior (5).
La infección de vías urinarias (IVU) es una de las
consultas por concepto infeccioso más frecuente del
servicio de urgencias, principalmente en los
pacientes adultos mayores que ha generado entre 7
millones y 8.4 millones de consultas a los servicios
de urgencias en países desarrollados. Se ha visto con
preocupación la variación epidemiológica de la IVU,
encontrando un incremento en el número de casos
secundarios a microorganismos productores de beta-
lactamasas de espectro extendido (BLEE), con las
implicaciones sociales, económicas y morbilidad que
esta acompaña (6).
Los síntomas del tracto urinario en mujeres se
caracterizan por la urgencia de orinar, la
incontinencia diurna, las maniobras de retención y un
aumento o disminución de la frecuencia de la micción
en ausencia de cualquier enfermedad neurológica o
anomalía anatómica del tracto urinario inferior. Las
beta-lactamasas de espectro extendido son un grupo
de beta-lactamasas que comparten la habilidad de
hidrolizar las cefalosporinas de tercera generación y
el aztreonam pero son inhibidas por el ácido
clavulánico (7).
Los factores biológicos más comunes de infección
pueden ser bacterias u hongos. Los factores de riesgo
incluyen la anatomía femenina, las relaciones
sexuales, la diabetes, la obesidad y los antecedentes
familiares. Aunque las relaciones sexuales son un
factor de riesgo, las IVU no se clasifican como
infecciones de transmisión sexual (ITS). Entre los
factores no comunes se encuentra la vejiga
hiperactiva es el trastorno del tracto urinario inferior
más común; sin embargo, queda por aclarar su
asociación con IVU (8).
En un estudio también se demostró que la micción
infrecuente es un factor de riesgo febril tanto en el
análisis univariado como en el multivariado, y puede
considerarse un predictor independiente. Este
síntoma podría conducir al desarrollo de una
infección urinaria al facilitar la acumulación de orina
residual, un factor de riesgo conocido de infección
urinaria. Las niñas tienen más probabilidades de
posponer la micción en comparación con los niños y
esto puede explicar el hallazgo del sexo como un
predictor independiente de IVU febril; sin embargo,
el aplazamiento de la evacuación como factor de
riesgo no alcanzó significación estadística (9).
Por lo anteriormente mencionado a través de este
estudio de revisión bibliográfica, se pretende
determinar las infecciones más comunes así como
conductas y factores de riesgos más frecuentes que
causan IVU en la mujer.
Materiales y métodos
Se realizó un estudio bibliográfico, que se trata de un
estudio basado en una serie de resúmenes de
publicaciones de fuentes científicas de revistas
digitales. Los artículos generales se utilizaron para
tomar datos relevantes al tema y extraer una
estructura lógica de contenidos. Se tomó referencias
de las revistas tales como: Scielo, PLOS – Public
Library of Science, Revues.org, Portal de Revistas
Científicas Complutenses, Ciencia, Portal de revistas
digitales de la UPV/EHU, E-Revistas publicadas por
las Universidades Españolas, REDIB, Free Medical
Journals.
En la búsqueda se tomaron 26 documentos de
información realizada a partir del año 2006 a 2019.
Criterios de inclusión
Documentos bibliográficos relacionados en el tema a
investigar
Para el desarrollo del análisis bibliográfico, se
realizó una selección de artículos científicos,
incluyendo la indagación de las bases de datos de
revistas científicas digitales tales como: Scielo,
PLOS – Public Library of Science, Revues.org,
Portal de Revistas Científicas Complutenses,
Ciencia, Portal de revistas digitales de la UPV/EHU,
E-Revistas publicadas por las Universidades
Españolas, REDIB, Free Medical Journals.
Criterios de exclusión
Artículos científicos que no se encuentren
relacionados con la temática.
Los métodos utilizados fueron los empíricos
(observacional) y teóricos (analítico y sintético),
porque se basan en el análisis y determinación de
resultados a partir de teorías relevantes. Se utilizó la
técnica de la observación.